Ser o no ser...

A veces tengo miedo de convertirme en una de esas personas que desean tanto lo que aún no tienen y que puede ser parte de su vida futura, que cuando lo obtengan ya no lo valoren tanto como antes. Para mi dolor de cabeza, hace días escuché a un escritor comentando que el problema de los anhelos es una cuestión de inconformidad y que Platón tiene gran parte de la culpa de esto por haber dicho que lo que se desea, siempre es lo que no se tiene, o algo así. Es decir que la carencia es el deseo, sí, exactamente, creo que eso era lo que decía…

Simplemente, a veces me preocupo demasiado por mi futuro. A veces creo que no está bien, a veces creo que sí. Siento que en este sentido soy fácilmente confundible, porque tengo claro lo que quiero, pero la poca paciencia no me ayuda. Entonces, trato de distraerme y olvidarme de lo que vendrá, porque ni siquiera se si viviré mañana, y vivo el hoy… no por mucho, siempre se escapa uno que otro pensamiento futurista. ¿Qué contienen estas ilusiones? En resumen: éxito laboral, familiar, personal,… Entonces me doy cuenta de que en cierta forma, ya lo tengo, y pienso en Platón y me parece tan cierta su relación carencia-deseo que me alarma un poco… ¿Es la norma ser inconformes?, ¿es un conformista el que no desea algo más de lo que tiene?, ¿qué es peor: conforme o inconforme?.

Los jóvenes solemos tener muchas dudas. Ya son 21 y posiblemente, sigo siendo una adolescente, sin berrinches ni malcriadeces quinceañeras, claro… pero sigo adoleciendo de ciertas cosas, me siguen preocupando algunas otras. Entonces pienso en esa película llamada “Los Miserables” en la cual pude una vez explicarme con claridad los tipos de conciencias, entre estas la de un joven: apasionada, muy determinada por sus deseos y sentimientos, y entonces me despreocupo un poco… Y así voy, navegando entre el mar de lo que está y lo que vendrá, conformándome con el deseo de más, mientras ese más no llega y arrancándome canas que ya empiezan a salir…